HERNIAS DE DISCO/DISCOLISIS

 

Discolisis percutanea

 

     El objetivo del uso del ozono con fines médicos es conseguir que las dolencias se eliminen con la mínima agresión posible. De allí que las infiltraciones de ozono para tratar las hernias discales y determinadas patologías del aparato locomotor, son tan efectivas, pues se basan en las propiedades bioquímicas de este gas mixto, que ofrece un buen resultado clínico y adecuado grado de tolerancia.

 

     Hace más de 10 años se viene practicando dicha terapia por prestigiosos médicos especialistas en Alemania, Rusia, Italia, España, Argentina, Venezuela y Cuba.

 

     La Discolisis con Ozono es una técnica que requiere ser realizada por médicos especialistas. Los primeros en usarla han sido los cirujanos de columna italianos, que han demostrado su eficacia en miles de pacientes, y quienes han realizado estudios clínicos multicéntricos para comprobar su efectividad.

La Discolisis se aplica mediante una inyección de una determinada cantidad de ozono medicinal en el disco herniado a través de una fina aguja, con control radiológico (Fluoroscopia); que al ponerse en contacto con los tejidos del disco vertebral actúa desinflamando éstos al estimular todas las enzimas celulares antioxidantes y desecando el disco vertebral.

 

        Esto hace que la hernia se comprima, lo que permite no sólo eliminar el dolor rápidamente, sino desaparecer ésta al cabo de los días. Los resultados no se ven de forma inmediata –como ocurre con la cirugía-, sino al cabo de varios días, en general entre dos y seis semanas; ya que es un proceso natural acelerado de desinflamación y de disminución del volumen del disco.

 

     Los resultados superan los obtenidos por la cirugía tradicional, ya que mediante la Discolisis con Ozono pueden tratarse hernias discales que hasta la fecha sólo podían calmarse mediante aplicaciones de calor, numerosos antiinflamatorios y analgésicos, o sometiéndose a una intervención quirúrgica abierta con el riesgo que esto implica.

 

Indicaciones

 

      Esta técnica está indicada en aquellos pacientes con cualquier patología de la columna vertebral que no responden al tratamiento conservador ni analgésico:

- Hernia discal cervical.

- Hernia discal dorsal.

- Hernia discal lumbar.

- Lumbalgia crónica.

- Discopatía lumbar.

- Estenosis degenerativa del canal vertebral.

- Fibrosis posquirúrgica.

- Síndromes facetarios.

 

Contraindicaciones

 

      La Discolisis con Ozono apenas tiene contraindicaciones, tan sólo algunos pacientes refieren mareo que se asemeja al que produce el “mal de altura” y, en algunos casos, cefalea que remite transcurrido un breve período de tiempo. Sin embargo debe evitarse su aplicación en los siguientes casos:

 

- Embarazo confirmado o sospechoso.

- Insuficiencia renal o hepática grave.

- Infarto de miocardio reciente.

- Conocimiento de abuso de alcohol, psicofármacos y narcóticos.

- Presencia de patologías o terapias concomitantes u otras condiciones que, a juicio del especialista, puedan interferir en el correcto efecto del tratamiento.

- Patología de naturaleza hemorrágica, o grave alteración de la hemocoagulación, trombocitopenia, hipertiroidismo o favismo.